Se pueden hacer tomas sorprendentes simplemente
descansando en el suelo y tumbado mirando al cielo, viendo pasar aviones, pájaros o nubes. En este caso, es la esquina superior y más alta de la terraza de mi casa acompañada por el ahora gran árbol que plantaron Leopoldo R y Cesar P, entonces un pequeño esqueje de chopo blanco, traído de la ribera del Duero a su paso por Soria.
La composición es sencillísima, ambos motivos se alinean en la diagonal del encuadre.
friki
ResponderEliminaradivina quien soy...
NO ME AS ENSEÑADO LAS PINTURAS